El diputado provincial Leonardo Moreno expresó un fuerte rechazo ante la decisión del Ministerio de Capital Humano de la Nación de paralizar la puesta en funcionamiento de la Universidad del Delta. Esta institución, que había sido planificada para tener sedes en los partidos de Escobar, Tigre y San Fernando, tenía como objetivo iniciar actividades en el ciclo lectivo actual.
La creación de la Universidad Nacional del Delta fue resultado de un proceso que involucró a diversos actores políticos y académicos, como Ariel Sujarchuk, Sergio Massa, Malena Galmarini, la diputada Alicia Aparicio y el intendente de San Fernando, Juan Andreotti. Después de un arduo trabajo y gestiones en el ámbito académico, se logró la aprobación de la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU). Sin embargo, la decisión del gobierno nacional de revisar esta creación, junto con otras cinco universidades nacionales, ha generado malestar y preocupación.
En su Proyecto de Declaración presentado en la Legislatura Bonaerense, Moreno destaca el impacto positivo que la creación de estas instituciones académicas tendría en el crecimiento y desarrollo social y productivo de las comunidades donde estarían ubicadas. Especialmente enfatiza en el acceso a la educación universitaria para hijos e hijas de trabajadores del conurbano, muchos de los cuales serían los primeros en su familia en tener esta oportunidad.
Moreno cuestiona la legitimidad y validez jurídica de la decisión de paralizar la Universidad del Delta, argumentando que debería haberse analizado previamente con la participación de los municipios involucrados. Considera que los municipios pueden dar cuenta de las necesidades que estas instituciones académicas buscan cubrir y de su importancia para el crecimiento cultural, social y económico de las zonas afectadas.
En su Proyecto de Declaración presentado en la Legislatura Bonaerense, el diputado Moreno expresa que “la creación de esas instituciones académicas implicó la decisión de impulsar el crecimiento y desarrollo social y productivo de cada una de las comunidades en las que se asientan las mismas, avizorándose con su puesta en funcionamiento una notoria mejora en el acceso de la población a la formación universitaria” y destaca que “la instalación de la Sede Regional Escobar permitiría el acceso a la educación de las hijas e hijos de trabajadores del conurbano, en muchos casos primeras generaciones en tener la posibilidad concreta de obtener educación universitaria”.