29.02.2024 / La Libertad Avanza

Antes del Congreso, Milei dijo que no lo necesita y que hay "cero posibilidades de un levantamiento"

El Pesidente habló con un diario inglés y, antes de abrir las sesiones del Congreso y tras el rechazo de la ley ómnibus y un posible fracaso del DNU, descartó al Congreso para su plan económico. “Estoy haciendo lo que los libros dicen que debo hacer”, advirtió.




El presidente Javier Milei insiste en su estrategia de confrontación y, a horas de abrir las sesiones ordinarias del Congreso de la Nación con el antecedente del fracaso de la Ley Ómnibus y la posible caída del mega DNU 70/23 afirmó que no necesita del parlamento para gobernar, que "está haciendo lo que los libros dicen" que debe hacerse y que hay "cero posibilidades" de una protesta social masiva

“Hay cero posibilidades de que se produzca un levantamiento social, a menos que haya un evento motivado desde la política o [que involucre] a infiltrados extranjeros”, aseguró en una entrevista con el medio internacional británico Financial Times el mandatario este jueves, en una especie de denuncia sin datos, a la vez que sostuvo que de la pobreza -que con sus primeras medidas escaló a más de 57% en enero, según la Universidad Católica Argentina (UCA) y tras heredar casi 10 puntos menos- no se sale “por arte de magia” sino con “capitalismo, ahorro y trabajo duro”.

Al retomar la supuesta situación de los infiltrados, Milei dijo que activistas de Venezuela y Cuba participaron de las últimas protestas contra su administración “disfrazados de fotógrafos”, cosa que no se corroboró y no hay registros de ello, y acotó: “Los gobiernos de izquierda trabajan juntos para intentar sabotear a aquellos que no son como ellos”.

En otro orden, el jefe de Estado volvió a decir que con sus medidas evitó la hiperinflación en el país, pese a que el peor mes del último gobierno tuvo alrededor de 14 puntos de inflación, mientras que su administración por ahora completó dos de esos períodos, con 25 y 20 puntos respectivamente. 

Según Milei, como subió fuerte la inflación respecto del último gobierno pero la bajó entre su primer mes y el segundo, el objetivo es continuar con esa tendencia en el indicador y terminar de limpiar el balance del Banco Central.

“Una vez que esté limpio, planeamos levantar los controles cambiarios. El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que podríamos hacerlo a mitad de este año”, insistió después también de la reunión con la número dos del organismo, Gita Gopinath, la semana pasada, y de que el miércoles el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, se encontrara con la líder de la entidad que supervisa el acuerdo con la Argentina, Kristalina Georgieva.



Con la ley ómnibus caída y el mega DNU en jaque en el Senado, y mientras crece la expectativa sobre el discurso que dará el viernes por la noche en la apertura del año legislativo tras sus duras críticas sobre todo a los diputados en las últimas semanas, el Presidente aclaró que hay cambios que podrá implementar por decreto, a través de modificaciones en la aplicación de ciertas leyes. “Todo eso lo haremos”, adelantó.

Según advirtió, un tercio de las mil medidas que quería aplicar a través de la ley ómnibus están incluidas en el DNU 70 que comenzará a tratar la comisión bicameral dispuesta para revisar este instrumento del Ejecutivo y admitió que es “difícil” con esta composición del Congreso avanzar con determinadas reformas por las trabas de los “políticos” que defienden sus privilegios.

En ese sentido, catalogó de “enemigos del cambio” a quienes se opongan de ahora en adelante a las iniciativas que, según dijo, seguirá girando al Palacio Legislativo.

“Estamos listos para devolver todas las reformas después del 11 de diciembre de 2025. Enviamos mil, pero todavía nos quedan 3000 más por presentar”, afirmó Milei, seguro de que la quita del cepo podría acelerar una recuperación económica a través de la inversión, lo que favorecería las chances electorales de su partido en las elecciones de medio término.

Por eso aseguró que "ese podría ser el punto de despegue para que el próximo año la Argentina esté creciendo de manera fuerte, sólida, sustentable y con baja inflación”, con lo que parece una esperanza mística en la salida de los controles cambiarios, cosa que ya intentó Mauricio Macri en su gobierno y arrojó resultados pésimos, e incluso señaló que si el país mantiene el déficit cero que alcanzó en enero - sustentado en la baja de jubilaciones, hecho que todos los analistas consideraron maquillaje e insostenible - estará en condiciones de refinanciar la deuda y regresar a los mercados internacionales de capital en 2024.

“La palabra que mejor representa a este gobierno es esperanza”, aseguró Milei, que defendió ante el diario inglés su política de shock. “¿Por qué sería arriesgado, cuando estoy haciendo exactamente lo que los libros de texto dicen que debo hacer?”, reforzó.

Sobre el marco internacional, Milei reafirmó sus vinculaciones con Estados Unidos, Israel y Ucrania. “Mi alineación es con Estados Unidos, más allá de si los demócratas o los republicanos están en el poder, independientemente de mis preferencias”, aclaró, tras su encuentro con el expresidente republicano Donald Trump, con quien tiene una fuerte sintonía, y el ruido que eso generó en la administración demócrata de Joe Biden.

“No fue una reunión bilateral o una situación premeditada, fue como el encuentro de dos amigos”, señaló de manera insólita, sobre ese cara a cara con el antes mandatario que pretende regresar a la Casa Blanca, en el tercer día de la Conferencia de Acción Política Conservadora de la que ambos participaron.

En el mismo sentido, el líder libertario insistió con su idea de armar una cumbre que nuclee a países de América Latina en apoyo a Ucrania, en medio de la guerra con Rusia, aunque no dio más detalles.