17.07.2025 / MERMA PRODUCTIVA

Analistas alertan por una caída de "grande en la actividad" de Vaca Muerta para el segundo semestre: "más del 35%”

Tras un buen desempeño en la primera mitad del año, las proyecciones anticipan una baja sustancial en la cantidad de etapas de fractura. La incertidumbre por el precio internacional del crudo, sumada al freno de inversiones, complica el ritmo del desarrollo no convncional.



 

Luego de que el Gobierno se ganara los fundados cuestionamientos de profesionales del sector energético por no prever la crisis que sufrió la población al cortarse el gas en distintos puntos del país, considerando la reserva proveída por el yacimiento patagónico, y a pesar de haber gozado de números favorables en el primer tramo del año, Vaca Muerta presentará una baja de la producción durante el segundo semestre, sobre el cual, analistas manifestaron preocupación. “Es una caída grande en la actividad, más del 35%”, alarmaron desde la empresa NCS Multistage.

La retracción ya se percibe en las operaciones de fractura para extraer el crudo. En junio se registraron 11 sets activos, por debajo de los 13 de mayo. Y si bien el año cerraría con un total superior al 2024, estimado en unas 21.000 etapas frente a las 18.000 previas, la segunda mitad tendrá una merma significativa. Desde la compañía de servicios petrolíferos, afirman que “la cantidad de etapas de fractura descenderá a 8.469 en el segundo semestre, contra las 12.274 del primero” en 2025.

La contracción también alcanza a la cantidad de equipos de perforación. El sitio web Bloomberg expuso datos de Aleph Energy, los cuales indican que en junio había 42 equipos en operación, de los cuales 34 correspondían a pozos no convencionales. La cifra implica una baja del 15% respecto al año pasado. "El crecimiento de Vaca Muerta apenas logra compensar la caída de los convencionales”, afirmaron los directivos de la consultora, y añadieron que el “no será un año de expansión sostenida” para el sector.

Entre los factores que explican la desaceleración, los analistas destacan el retroceso del precio internacional del crudo, la falta de certidumbre económica local y el aumento de los costos operativos. “La caída de actividad ya se vio en el último mes. Esta merma va a continuar en lo que resta del año y no se observan señales de recuperación”.

Desde el plano corporativo, también se registran señales concretas de ajuste. En la presentación de resultados del segundo trimestre, Vista Energy, la segunda productora de petróleo de la cuenca, informó que invertirá US$100 millones menos que en 2024. Además, bajará de 50 a 36 la cantidad de pozos conectados en sus áreas operadas, número que se eleva a 59 si se contabilizan los de La Amarga Chica, bloque operado por YPF.

Pese a los datos de producción acumulada que siguen en alza respecto al año anterior, el panorama en las cuencas convencionales es más crítico: en varias provincias, el retroceso de actividad derivó en conflictos gremiales.

En Santa Cruz, se agravó la disputa entre Schlumberger y los sindicatos por despidos, situación similar a la de La Pampa, donde la empresa PCR evitó cesantías tras un acuerdo. Casos similares se registraron en Chubut y Mendoza, en este último caso tras la salida de YPF de los campos maduros. Allí, Petrolera Sudamericana enfrenta medidas de fuerza luego de dejar sin trabajo a 100 empleados.