La automotriz alemana Volkswagen (VW) ha comenzado un proceso de desvinculación de 300 operarios en sus plantas argentinas de Pacheco y Córdoba. Según fuentes gremiales, estos despidos, que incluyen tanto cesantías como retiros voluntarios, son parte de una estrategia de ajuste debido a la caída en el mercado interno y externo. La compañía ha confirmado que está adecuando su estructura en respuesta a la nueva situación del mercado, pero ha evitado detallar el número exacto de despidos.
El contexto de estas desvinculaciones no es aislado. La industria automotriz argentina está experimentando una caída del 24% en la producción respecto al año anterior, con una disminución del 36% en las ventas de vehículos nacionales en el mercado interno y del 14% en las exportaciones. Este descenso ha llevado a otras automotrices, como Toyota, Renault, Nissan y General Motors, a implementar medidas similares, incluyendo retiros voluntarios y recortes de empleos.
Desde la perspectiva de los trabajadores, la situación ha generado gran preocupación y acusaciones de persecución antisindical. Un grupo denominado Trabajadores Despedidos de Volkswagen en Lucha por la Reincorporación ha denunciado que la empresa inició un proceso de reorganización de producción que se tradujo en despidos encubiertos para quienes decidieron no optar por los retiros voluntarios. Según el comunicado del grupo, la empresa pretende aumentar sus ganancias a costa de la estabilidad laboral de sus empleados, a pesar de que la planta de Pacheco sigue produciendo 400 unidades diarias, lo que refuta la noción de una crisis de producción.
Entre los despedidos se encuentran exdelegados gremiales, como Javier Aparicio, quien ha rechazado su cesantía mediante una carta documento, calificándola de "discriminatoria, antisindical e improcedente". Aparicio, conocido por su afiliación con la izquierda sindical, también ha denunciado despidos de trabajadores cercanos al diputado peronista Mario Manrique, lo que sugiere una posible interna gremial. La denuncia apunta a una estrategia de despido que favorece a algunos sectores dentro del sindicato, liderado por Ricardo Pignanelli.
La situación en Volkswagen refleja una tendencia preocupante en la industria automotriz argentina, que enfrenta desafíos significativos debido a la recesión económica y la disminución de la demanda tanto local como internacional.