A través de la Administración de Parques Nacionales (APN), el Gobierno de Javier Milei aumentó los precios de la entrada a once parques nacionales. Para los residentes argentinos, la suba es aproximadamente del 300 por ciento, mientras que a turistas extranjeros es entre el 75 y 150 por ciento.
“Para llevar adelante la tarea de conservación hacen falta recursos y el turismo sustentable nos permite hacernos de ellos. La corrección en el precio de las entradas a los Parques Nacionales va en línea con ponerlos en valor. Nuestros parques valen lo que cuestan”, argumentó el presidente de la APN, Cristian Larsen, dirigente cercano a Patricia Bullrich.
Además, le dejó un mensaje al gobierno anterior: “Desde que asumimos, estamos abocados a poner orden la Administración luego del estado de desidia y descontrol en que la dejó el kirchnerismo”.
Con estos nuevos aumentos, lo que llama la atención son los precios internacionales para ingresar a los parques nacionales: hoy, un visitante extranjero pasará de pagar 20 mil a 35 mil pesos el ingreso al Parque Nacional Iguazú y es más caro que la entrada al Gran Cañón o Yellowstone, en Estados Unidos, donde el pase de peatones es de USD 20 por persona y el de vehículos de hasta 15 personas es de USD 35.
De todas maneras, en la Argentina están exentos del pago de las tarifas los jubilados y pensionados; los niños de hasta 5 años; las visitas educativas; las personas con discapacidad; los residentes locales; las visitas protocolares; los guías y coordinadores.