01.12.2025 / EN EL DÍA MUNDIAL DEL VIH-SIDA

Fundación Huésped alerta por un fuerte recorte a partidas destinadas a VIH en el Presupuesto 2026

La organización advirtió que el proyecto oficial reduce o directamente elimina fondos clave para prevención, testeo y tratamientos, lo que pondría en riesgo la respuesta sanitaria y agravaría la situación epidemiológica.





En el marco del Día Mundial del VIH-SIDA, la Fundación Huésped denunció un grave recorte proyectado en las partidas destinadas a dar respuesta al VIH en el Presupuesto 2026, una decisión que la entidad considera regresiva porque amenaza el sostenimiento de los tratamientos actuales y deja en segundo plano áreas esenciales como la prevención, los diagnósticos tempranos y la disponibilidad de insumos. "El presupuesto es la expresión de las prioridades de la gestión actual”, advirtió el organismo. 

Según su análisis, uno de los puntos más críticos es la desaparición de las herramientas de prevención combinada: en las metas presupuestarias de 2026 no figuran ni la Profilaxis Pre-Exposición (PrEP) ni la Profilaxis Post-Exposición (PEP), pese a que en 2023 miles de personas accedieron a estos métodos. 

La política de ajuste también impacta en el acceso al diagnóstico, ya que el proyecto prevé distribuir 581.000 test rápidos, un 49,3% menos que en 2023
, una reducción que podría profundizar la tendencia actual en la que el 45% de los diagnósticos de VIH en Argentina se realizan de manera tardía, lo que dificulta el inicio oportuno del tratamiento y compromete el principio de Indetectable | Intransmisible, basado en la indetectabilidad viral.

El informe señala además una caída en la disponibilidad de reactivos de carga viral, con solo 116.215 pruebas proyectadas para 2026, una cifra insuficiente para cumplir con las dos mediciones anuales recomendadas por organismos internacionales y que resulta clave para garantizar la eficacia del tratamiento y evitar la transmisión.

A esto se suma la ausencia total de materiales educativos o preventivos, cuya producción y distribución se detuvo en 2023 y que, según el proyecto, seguirá en cero en 2025, un retroceso que afecta la información pública y desalienta la demanda de acceso al sistema de salud, mientras que otras patologías como Hepatitis C y Tuberculosis también sufrirían recortes del 44% y 11% respectivamente.

"El derecho a la salud no puede ser una variable de ajuste presupuestario”, cerró Huesped, al tiempo en que advirtió que cada desinversión en prevención, testeo y tratamiento oportuno implica mayores costos sanitarios y económicos en el futuro, además de más complicaciones y peores desenlaces clínicos.