La pobreza en Argentina cerró el año 2023 en un preocupante 41,7%, según datos revelados por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Este índice representa un incremento significativo en comparación con el 39,2% registrado el año anterior. De manera alarmante, cerca de 19,4 millones de personas se vieron afectadas por esta situación de precariedad económica en todo el país.
En lo que respecta a la indigencia, la cifra alcanzó el 11,9%, lo que equivale a aproximadamente 5,5 millones de argentinos que no logran satisfacer sus necesidades alimentarias básicas. Este aumento en los niveles de pobreza e indigencia durante el año 2023 se atribuye en gran medida al deterioro económico experimentado, exacerbado por la persistente inflación y la recesión que afectaron el poder adquisitivo de los salarios y las jubilaciones. La inflación anual cerró en un alarmante 211,4%, marcando el nivel más alto en tres décadas.
Hay que destacar que estos indicadores negativos publicados este miércoles por el INDEC se produjeron en un contexto en el que los porcentajes de desempleo mostraban una tendencia favorable, lo que sugiere que el fenómeno está principalmente relacionado con la pérdida de poder adquisitivo de la población.
Es importante recordar además las palabras del presidente Milei durante la apertura de sesiones ordinarias, quien afirmó de manera controversial que "La pobreza se ha multiplicado por 10 en los últimos 50 años" pero no dio respuestas sobre dinamica ascendente dada durante apenas 90 días de gestión.
De hecho, el mes pasado el Observatorio Social de la UCA proyectó que la población en situación de indigencia pasó del 9,6% en el tercer trimestre de 2023 al 14,2% en diciembre de 2023 y al 15% en enero de 2024. Y el nivel de pobreza subió del 44,7% observado en el tercer trimestre de 2023 al 49,5% en diciembre y al 57,4% en enero.
