13.01.2024 / Santa Fe

Rosario: encuentran dos nuevas amenazas al gobernador Pullaro

Una de las amenazas fue realizada en la Escuela Técnica número 466 y la otra en el centro de salud “Jean Henry Dunant”. Ambas fueron realizados con el mismo aerosol.





El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, recibió nuevamente amenazas, esta vez, fueron dos pintadas en una escuela y en un centro de salud público de la zona oeste de la ciudad de Rosario. 

En ambos casos, las pintadas fueron realizadas con un aerosol color rosa y el mismo texto: “Pullaro narco, con los presos no se jode”, precisaron fuentes policiales. 

Una de las pintadas fue descubierta en la Escuela Técnica número 466 “General Manuel Savio”, situada en Rouillón y White, por su director. “No sé si lo hicieron anoche o cuándo fue, pero seguro que fue en estos días porque a principios de semana no estaba”, afirmó el directivo, de nombre Juan Carlos, a un canal televisivo local.

Además, dijo que “la sorpresa es que hayan usado la vereda de nuestra escuela para dar un mensaje”, aunque existen antecedentes de notas enviadas en establecimientos educativos y hasta balaceras a las fachadas como mensajes mafiosos.

La otra pintada, idéntica a la de la escuela en su contenido, apareció en el centro de salud “Jean Henry Dunant” ubicado en calle Teniente Agneta al 1400, a pocas cuadras de la Técnica Nº 466.
El texto escrito es el mismo y sus autores utilizaron un aerosol idéntico de color rosa, por lo que los investigadores no descartan que hayan sido las mismas personas quienes efectuaron las dos pintadas, aunque es materia de investigación y pericias caligráficas.

El lunes pasado el propio gobernador reveló durante un acto en el Registro Civil de Rosario que minutos antes se había encontrado una nota intimidatoria hacia su familia en la sede local de la Dirección Nacional de Migraciones.

Pullaro contó que había decidido sacar a su familia de la ciudad de Rosario como medida preventiva por las amenazas recibidas.

El fiscal que investiga esos hechos, Carbone, considera que se trata de “reacciones” a la decisión oficial de alojar a los presos de alto perfil en los mismos pabellones y separados del resto de la población carcelaria, y con restricciones en sus condiciones de detención.