El gobierno de Javier Milei, a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), oficializó este martes la suspensión del programa Créditos ANSES para jubilados, pensionados, trabajadores en relación de dependencia y beneficiarios de la AUH, entre otros, con la "emergencia pública" y el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS) como excusas.
Mediante la
Resolución 1/2023 y en consonancia con la "emergencia pública" en materia económica, financiera, fiscal, administrativa, previsional, tarifaria, sanitaria y social hasta el 31 de diciembre de 2025 establecida mediante el Decreto 70, el programa ingresará en un estadio de revisión.
Textualmente, la gestión de Milei puso como argumento para suspender los créditos para sectores vulnerables, como jubilados y beneficiarios de la AUH, la necesidad de
“contribuir a la preservación del valor y rentabilidad” del FGS, el mismo en el que el ministro de Economía, Luis Caputo, piensa utilizar para reducir las leliqs y tomar deuda.
“Suspéndase transitoriamente el otorgamiento de créditos, en el marco del Programa CRÉDITOS ANSES”, determina la resolución, donde además se sostiene que la actual inversión en el programa “debe ser reanalizada considerando si el contexto económico del país que torna dificultoso ponderar el indice inflacionario de los próximos meses, así como la tasa de interés a aplicar dentro del mercado de préstamos personales”.
De este modo, el gobierno denomina
“medida preventiva y temporal” a la interrupción del financiamiento “hasta tanto se estabilicen las variables económicas y puedan evaluarse las condiciones financieras vigentes”.
El programa, anunciado el pasado 1 de noviembre e impulsado por el ex ministro de Economía Sergio Massa y la ex titular de ANSES Fernanda Raverta, permitía a los trabajadores en relación de dependencia con un salario de hasta $1.980.000 que no paguen impuesto a las Ganancias pedir préstamos de hasta $1 millón con una Tasa Nominal Anual (TNA) subsidiada del 50% a pagar en 24, 36 o 48 cuotas. Se estimaba que la iniciativa podía alcanzar a 5,4 millones de personas.
Pedir dicho préstamo contaba con mínimos requisitos: residir en la Argentina en forma permanente, tener una antigüedad laboral no menor a 6 meses, no ser trabajador eventual o de casas particulares, no superar la situación 2 en la Central de Deudores del BCRA y ser titular de una tarjeta de crédito en el banco donde cobrás tu sueldo. Además, se comenzaba a pagar a los tres meses de ser solicitado.
En el caso de los jubilados y pensionados del Sistema Integrado y Previsional Argentino (SIPA), el crédito tenía un límite de hasta $600.000 y para los titulares de Pensiones No Contributivas (PNC) y Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) de hasta $250.000, con una TNA del 29%.