Mientras el gobierno de Javier Milei dirige su atención hacia el cambio de nombre del CCK, en Argentina se profundizan diversas problemáticas. Salud, jubilados, narcotráfico, construcción y desfinanciamiento universitario, entre los problemas
En materia de salud, el gobierno nacional se enfrenta a un brote histórico de
dengue ha afectado al país, registrando más de 200.000 casos y más de 100 muertes. La incidencia acumulada es de 321 casos por cada 100.000 habitantes, destacando algunas provincias como las más afectadas. Cabe preguntarse cómo hubiera reaccionado el gobierno de Milei ante el COVID. En tanto,
los gobierno provinciales avanzan en materia de políticas públicas.
En tanto, pese a las promesas del oficialismo,
los jubilados enfrentan una significativa pérdida del poder adquisitivo, con una subida del 27,18% en sus haberes este mes. Se proyecta que terminarán el primer trimestre del año con una pérdida del 42% respecto al mismo período del año anterior.
Asimismo, tras la paralización de la obra pública, el sector de la
construcción enfrenta despidos masivos, con la posibilidad de que lleguen a los 200.000, y más de 2.000 obras públicas paralizadas debido al ajuste fiscal del gobierno de Milei.
Pese a que e
l Ejecutivo se vanagloria en materia de seguridad y defensa, las amenazas narcos recrudecieron como asi también su accionar. La ciudad de
Rosario ha experimentado un aumento alarmante de la violencia, con varios asesinatos a sangre fría en los últimos días, llevando preocupación a la población debido a los ataques aleatorios perpetrados por sicarios.
También en materia educativa el gobierno está dejando que hablar. De hecho, la Universidad de Buenos Aires alerta sobre su situación presupuestaria crítica, con actividades básicas en peligro debido al desfinanciamiento. Se ha lanzado una campaña bajo el lema "Cuidemos lo que funciona. #SomosUBA" para recolectar firmas y manifestarse contra el congelamiento presupuestario.
